LOCAL O SEDE

Sí, es necesario informar mediante carteles, el protocolo a seguir, así como señalizar las zonas de higienización y toma de temperatura. También se deben indicar las zonas de entrada y salida. 

No, debe evitarse proporcionar folletos ya que son objeto de transmisión de COVID-19. Toda la documentación e información necesaria se puede aportar y enviar de forma digital a las personas que lo requieran.

Se establecerán medidas para habilitar varias entradas y salidas, así como marcar el sentido de la marcha y el flujo de movimientos garantizando que todas las personas puedan entrar por un espacio y puedan salir por otro. De esta manera, se evitan colas y se garantiza la distancia interpersonal.

El aforo máximo permitido será el que establezca el nivel de alerta según la capacidad máxima. Será necesario que en todo en momento se pueda mantener la distancia de seguridad interpersonal.

Durante las actividades presenciales de acción voluntaria se deberán dejar las ventanas abiertas durante todo el desarrollo de la misma. También se deben dejar abiertas a la hora de realizar la limpieza y se deberá aumentar la frecuencia de limpieza y desinfección de los filtros de ventilación. 

ANTES DE LA ACTIVIDAD

Sí, siempre y cuando se cumplan las normas de seguridad e higiene a la hora de realizar una actividad voluntaria, así como tener en cuenta las restricciones y normativas vigentes en el momento que se realicen.

Se han de tener en cuenta las normas de seguridad y prevención:

–  Distancia de seguridad interpersonal, uso de la mascarilla, higiene respiratoria y desinfección de manos. 

– La limitación de contactos será una de las vías para reducir la posibilidad de contagio y de transmisión de COVID-19.

– La limpieza y ventilación básicas para reducir el riesgo de transmisión en espacios cerrados.

– Tener un protocolo de gestión de casos para detectar y actuar en consecuencia ante un contagio. El aislamiento y la prevención son pilares fundamentales en este punto. 

Las última palabra la tendrá la entidad que decidirá qué es lo más conveniente para la organización y para las personas voluntarias. 

El protocolo COVID-19 debe estar a disposición de todas las personas que formen parte de la entidad. Se enviará una comunicación vía correo electrónico con el documento digital. Se recomienda publicarlo en una plataforma o web, donde las personas de la entidad y las personas voluntarias tengan fácil acceso. 

Las personas voluntarias deben conocer el protocolo de seguridad a seguir antes, durante y al finalizar la actividad, así como conocer el riesgo que supone realizar una actividad presencial en la situación actual.

Deben saber qué medidas de prevención y seguridad se deben cumplir durante la acción voluntaria y se les deberá comunicar si existen personas de riesgo a la hora de realizar la actividad voluntaria, con el fin de extremar las precauciones. 

No es necesario realizar una prueba COVID-19, a no ser que así lo indique la normativa vigente en el momento de realizar la actividad voluntaria.

El número de personas que se pueden reunir en una actividad estará regulado por la normativa vigente en el momento que se realice la acción voluntaria. 

El seguro de voluntariado no cubre enfermedad. Cubre accidentes o responsabilidad civil.

Las personas voluntarias deben poder ser localizables a través del número de teléfono o correo electrónico que hayan facilitado. A través de estos medios se les podrá informar y comunicar cualquier cuestión relacionada con la labor voluntaria ya realizada o que se va a realizar. También será la vía de contacto para informar sobre las actualizaciones de COVID-19 en el voluntariado realizado.

Es recomendable que exista una persona que se encargue de gestionar las cuestiones relacionadas con el COVID-19. Entre sus tareas estaría conocer el protocolo COVID-19, responsabilizarse de que las personas voluntarias han recibido la formación y/o formación adecuada, dotar de los medios de protección, actuar en consecuencia en caso de que se una persona presente síntomas durante una actividad, informar a través de los canales de comunicación, y ser la persona de referencia a quien dirigirse en caso de dudas. 

El certificado acreditativo de desplazamiento será necesario si las restricciones de movilidad lo requieren, y siguiendo las instrucciones de las autoridades competentes. Es decir, si la persona que va a realizar la acción voluntaria necesita desplazarse a un municipio, provincia o comunidad autónoma diferente a la suya y que, según la normativa del momento, le impida hacerlo con normalidad. 

 

La persona voluntaria que presente síntomas propios del COVID-19 como tos, fiebre, dificultad para respirar… no podrá acudir a la entidad de voluntariado. Tampoco será posible si la persona ha tenido un contacto estrecho con la persona afectada por la COVID-19. 

DURANTE LA ACTIVIDAD

Antes de comenzar la actividad, las personas voluntarias procederán a la limpieza de manos con gel hidroalcohólico. También se les hará un control de temperatura. 

Durante toda la actividad el uso de la mascarilla será obligatorio, así como el mantenimiento de la distancia de seguridad interpersonal. 

En las actividades presenciales de voluntariado, se debe dejar las ventanas abiertas para garantizar la ventilación natural. También deben permanecer abiertas a la hora de realizar la limpieza y desinfección. 

Es recomendable desinfectar y limpiar periódicamente manillas, interruptores, escaleras y todo aquello que implique un uso común por las personas que frecuenten la entidad. 

La distancia de seguridad de 1,5 m. debe mantenerse en todo momento en el que se esté desarrollando la acción voluntaria. En zonas comunes, salas de descanso, reuniones, etc. Deben evitarse las aglomeraciones de personas. 

 

  • Control de temperatura 
  • Mascarillas higiénicas obligatorias
  • Distancia de seguridad interpersonal de 1,5 m.
  • Limpieza de manos frecuente
  • Higiene respiratoria
  • Ventilación

 

Las personas voluntarias deben portar su propia mascarilla. La entidad se encargará de proporcionar gel hidroalcohólico para garantizar la limpieza de manos y el control de temperatura previo a comenzar la actividad. Según la actividad desarrollada, será la entidad quien deba facilitar todas las herramientas de protección necesarias.

La persona responsable de voluntariado, o en su defecto, de la actividad, será la responsable de recoger la mayor información posible sobre las situaciones de contacto. Para garantizar un buen flujo de comunicación, se trasladará la información a dirección y a las autoridades competentes.

Para garantizar la seguridad en espacios compartidos se deberá limitar dichas zonas y seguir las normas de seguridad y prevención básicas: ventilación de espacios, desinfección de zonas comunes, regulación de flujos de entrada y salida, distancia de seguridad interpersonal y material de protección (mascarillas y gel hidralcohólico).

En caso de no poder evitar el uso de equipos compartidos, será necesario desinfectar antes y después de usar, utilizando en todo momento mascarilla, guantes y papel desechable. 

Es recomendable que los materiales utilizados durante la actividad sean de uso individual. En caso de no ser posible, se procederá a la desinfección previa y posterior. Si no es posible su desinfección, el lavado de manos previo es fundamental. 

La persona voluntaria debe dirigirse a la persona responsable de realizar el seguimiento de COVID-19 presente en el momento, o en su lugar, a la persona responsable de coordinar la actividad, quienes se encargarán de poner en marcha el protocolo indicado. 

Los pañuelos desechables utilizados se recomienda desecharlos en papeleras con tapa y si es posible, con pedal. Si una persona presenta síntomas, se procederá a aislar la bolsa de basura donde haya depositado los productos utilizados para posteriormente ubicarla en una segunda bolsa y, finalmente, tirarla.

EN CASO DE POSITIVO COVID-19

Se considera contacto estrecho cualquier persona que haya proporcionado cuidados a una persona durante el transcurso de la actividad y que no haya utilizado las medidas de protección indicadas. También aquellas personas que hayan estado a una distancia menor de 2 metros y durante 15 minutos, con el caso positivo. En centros educativos se seguirá la Guía de actuación ante la aparición de caso COVID-19 en centros educativos.

La persona voluntaria que haya dado positivo en COVID-19 deberá comunicarlo a la entidad. Seguidamente se comprobará si se se cumplió el protocolo durante la actividad con el fin de identificar contactos estrechos. Si este se ha producido se comunicará y se esperará a las instrucciones de las autoridades sanitarias.

La persona voluntaria que haya sido contacto estrecho no podrá acudir a actividades presenciales en 10 días. Y la persona que haya sido positivo deberá esperar tres días o más hasta no tener síntomas y al menos 1 días desde el diagnóstico.